17 marzo 2010

El argumento de la obra



Narciso en Calibán titula Andreu Jaume el prólogo que introduce El argumento de la obra, la edición que ha preparado en Lumen de la correspondencia de Jaime Gil de Biedma.

Se recogen aquí las cartas que el autor de Las personas del verbo escribió entre 1951 y 1989. En una de ellas, fechada tal día como hoy, el 17 de marzo de 1967, le decía a Gustavo Durán:

Grecia me vuelve por momentos, con una nitidez casi absoluta. Haber estado allí es realmente una experiencia importante. ¡Gran país para ser sabio! Nuestro litoral mediterráneo está bien, pero, pero, no es eso, no llega a serlo. A menudo recuerdo un poema de Kavafy, releído una mañana en la terraza de Evzonon 3, en una pausa entre dos miradas al monte Himeto, o a los popes deambulando por el huertecillo de abajo. Se titula «Jonia» y dice que aunque hemos destronado a los dioses, los dioses no han abandonado a Grecia y en algunas mañanas es perceptible la huella luminosa de su paso por las colinas. Es muy bello y además es verdad.

Se refleja aquí en primera persona la configuración de su mundo personal y literario, sus preocupaciones intelectuales y su evolución estética a través de la correspondencia con maestros y discípulos, con poetas y críticos. Desde los mayores como Guillén a los jóvenes como Gimferrer o García Montero, pasando por amigos y compañeros de viaje como Carlos Barral, Gabriel Ferraté, Juan Marsé, Caballero Bonald o José Ángel Valente.

Cuando se han cumplido veinte años de su muerte y está a punto de aparecer también su obra completa en Galaxia Gutenberg, es la primera vez que se edita íntegramente la correspondencia de Gil de Biedma. El lector tiene una magnífica ocasión para conocer ese material privado, esa intimidad cotidiana que ilumina gran parte de su obra y que esta semana llega a las librerías.