24 febrero 2015

La cabellera de la Shoá



Esta es la cabellera de la Shoá.
Calla más que el silencio y está ciega.
Lo ve todo. Retumba.

Hace seis años, la sacudida interior de una visita a Auschwitz recuperó la voz poética de Félix Grande, que escribió, entre la conmoción, el arrebato indignado y la alucinación, un texto memorable, La cabellera de la Shoá. Un largo e intenso poema sobre los mil novecientos cincuenta kilos de pelo cortado a las mujeres deportadas al campo de exterminio de Auschwitz. 

“Había cabello rubio, moreno, pelirrojo, todo mezclado, decolorado por el paso del tiempo. De repente, me pregunté ¿de qué color es este pelo? Era un color nuevo. No había existido antes. /.../ Cuando lo vi tuve que poner las manos en el cristal porque con los ojos no me valía”, recordaba, conmovido aún años después de contemplar aquel mueble de catorce metros que se convirtió en una metáfora del horror y el exterminio. 

Aquel largo e intenso poema de mil versos cerró la última edición de Biografía, su poesía reunida en Galaxia Gutenberg / Círculo de Lectores, y ahora aparece en edición exenta en Bartleby Editores, con un completo epílogo de Juan José Lanz.

La cabellera de la Shoá
pesa mil novecientos cincuenta kilos de pelo de mujer.
La cabellera de la Shoá
pesa un milenio y otro de ruidos cercanos en la noche.
La cabellera de la Shoá
pesa setecientos mil días fronteros de diáspora.
La cabellera de la Shoá
pesa dos toneladas europas de desmisericordia.
La cabellera de la Shoá
pesa dos mil colmillos anuales de calumnias.
La cabellera de la Shoá
pesa un derrumbamiento del sosiego
multiplicado por cien generaciones
de criaturas humanas como tú.
Todo esto antiguo y junto pesa esta cabellera
de suave pelo de mujer sin nombres.
La cabellera de la Shoá
pesa mil novecientos cincuenta abismos de silencio.

La cabellera de la Shoá es, además de un estremecido poema mayor del Félix Grande último, una contestación explícita a Adorno, porque escribir después de Auschwitz no sólo es posible, sino también más necesario e imprescindible que antes de Auschwitz.