05 mayo 2015

Falstaff



No te conozco, anciano; vete a rezar.
¡Qué mal sientan las canas a un bufón!
Soñé con tal hombre mucho tiempo,
tan hinchado, tan viejo y malhablado,
mas, ya despierto, el sueño me repugna.
Desde hoy mengua el cuerpo y aumenta la virtud,
deja de atracarte y piensa que la tumba
se abre para ti tres veces más que para otros.

William Shakespeare. Segunda parte de Enrique IV. 
Traduccion de Ángel-Luis Pujante. 
En Dramas históricos. Espasa. Barcelona,  2015