El país donde florece el limonero

En los siglos XVI y XVII el zumo de los limones de Amalfi se mezclaba con miel o azúcar para hacer sorbetes. En 1602, cuando el virrey de Nápoles acudió a la ciudad para un banquete de Pascua, le sirvieron un sorbete hecho con zumo de limón y nieve. La nieve se había conservado en nivare, fosos construidos a propósito en las laderas de la montaña, sobre la ciudad. Actualmente los limones de Amalfi se suelen pelar, se cortan en finas rodajas y se combinan con ajo, aceite de oliva, una gota de vinagre de vino blanco, menta picada y sal. Comer limones crudos siempre me ha resultado difícil, pero para los locales el intenso sabor de estos chispeantes frutos amarillos constituye la esencia misma del verano.

Helena Attlee.

El país donde florece el limonero. 

La historia de Italia y sus cítricos.

Traducción de María Belmonte.

Acantilado. Barcelona, 2023.