Javier Sánchez Menéndez. 1335 días

 Bienaventurado el que esperare, y llegare hasta 1335 días. Y tú irás al fin, y reposarás, y te levantarás en tu suerte al fin de los días.

De ese pasaje preapocalíptico y profético del Libro de Daniel toma su título el último libro de poesía de Javier Sánchez Menéndez, que publica Detorres Editores.

Contemplar, atender, entender es su subtítulo, que se explica en la primera frase del primero de los cuarenta y dos textos que componen el libro:

La vida es el conjunto de contemplaciones, de atenciones y de entendimientos del ser humano.

Y así, entre la contemplación tranquila de la naturaleza como obra de arte y la atención sustanciada en la palabra y el concepto al que responde, los textos de este libro completan un itinerario ascendente desde la oscuridad a la luz, un camino vertical hacia la estrella.

Un camino vertical como el de los pájaros, que “contemplan, atienden y entienden”, afina la reflexión sobre la vida y la muerte, sobre la verdad de la creación y del poema, sobre la mentira y lo siniestro, cuando “siguen entre nosotros las palomas, los mirlos y las urracas” y “los amorales sonríen para enseñarnos sus dientes, los restos de la carroña en ellos, el rastro de sus órdenes, su representación y su espectáculo. Todo en ellos es falsedad, todo en ellos es vacío, pero las legiones les aplauden, les siguen, se congratulan de su mentira.”

Contemplación y creación, entendimiento y paisaje se convierten de esa manera en el hilo de oro que permite orientarse en el laberinto a través de la palabra, porque “la palabra es poesía solo si la palabra es cosmos, solo si la palabra es entendimiento, solo si la palabra es profecía. La palabra es contemplación, es atención y es entendimiento.”

Cada uno de los textos del libro incorpora un código QR que permite acceder al poema leído por su autor. Así termina el último:

Todo desaparece y todo muere alrededor de las aves. La región se ha llenado de sombras, mil trescientos treinta y cinco días.