02 enero 2008

Juan Ramón de viva voz

Seguramente nadie haya sido tan determinante en la poesía española del siglo XX como Juan Ramón Jiménez. Y no sólo porque abriera el camino al primer 27 con su neopopularismo temprano o con su poesía pura, sino porque algunos de los libros esenciales de la poesía española contemporánea, desde Marinero en tierra a Poeta en Nueva York pasando por Cántico, están ya previstos en su obra, especialmente en ese libro seminal que es el Diario de un poeta reciencasado, en el que están anunciadas con diez o quince años de anticipación algunas de las claves de la poesía posterior.

Este año que acaba de empezar se conmemora el medio siglo de la desaparición de Juan Ramón. Y una de las maneras posibles de acercarse a su figura es la lectura de otro diario, el diario indirecto que su amigo Juan Guerrero Ruiz (Cónsul general de la poesía lo llamó Lorca en una dedicatoria) escribió para dar cuenta de sus encuentros y sus conversaciones desde el 27 de mayo de 1913 hasta el 29 de junio de 1936.

Juan Ramón de viva voz se titula ese espléndido y raro libro que tuvo una primera edición mutilada en 1961. Hace diez años Pre-Textos publicaba la versión íntegra en dos tomos que abarcan desde 1913 hasta 1936 de este libro, que es el diario de una amistad y está escrito con una admiración sin límites, pero que refleja también –quizá involuntariamente- las zonas de sombra del poeta.

Reseña íntegra en la revista Encuentros de lecturas y lectores