01 diciembre 2018

El diletante más denostado. Jung y la creación de la psicología moderna



“Ocultista, científico, profeta, charlatán, filósofo, racista, gurú, antisemita, feminista, misógino, apóstata freudiano, gnóstico, posmoderno, polígamo, sanador, poeta, estafador, psiquiatra, antipsiquiatra... ¿Qué no habrán llamado a Carl Gustav Jung? Basta con mencionarle su nombre a alguien para oír alguna de estas palabras, pues todo el mundo –con razón o sin ella– tiene una opinión sobre Jung. La rapidez en contestar indica que la gente juzga su vida y su obra como si fueran de dominio público. Pero la proliferación de «jungs» nos lleva a preguntarnos si todos hablan de la misma persona. 
En 1952, a propósito de los calificativos de teísta, ateo, místico y materialista que había merecido, Jung escribió: «Cuando las opiniones sobre un objeto divergen tanto, tenemos razones para sospechar que ninguna de ellas es correcta, es decir, que se trata de un malentendido». Al cabo de casi cincuenta años, el número de opiniones e interpretaciones se ha multiplicado de manera prodigiosa. Jung sigue suscitando mitos, leyendas, fantasías y ficciones. Las burlas, distorsiones y caricaturas son la norma. Y este proceso no tiene visos de remitir.
Desde joven, Jung fue objeto de numerosos rumores. En 1916 le escribió a su amigo y colega Alphonse Maeder: 
En cuanto a los rumores sobre mi persona, puedo decirte que estuve casado seis años con una estudiante rusa (ref. Dr. Ulrich); que, haciéndome pasar por el doctor Frank, recomendé a una mujer que se divorciara de inmediato (ref. Frau E-Hing); que hace dos años destruí el matrimonio Rüff-Franck; que recientemente dejé embarazada a la señora McCormick, me deshice del niño y recibí un millón por ello (ref. Dr. F. & Dr. M. en Z.); que me dedico a internar a hermosas jovencitas en la casa del Club para satisfacer las necesidades homosexuales de la señora McCormick; que envío a sus chicos al hotel, obteniendo pingües beneficios por ello; que soy un judío calvo (ref. Dr. Stier en Rapperswyl); que tengo una aventura con la señora Oczaret y me he vuelto loco (ref. Dr. M. en Z.); que soy un timador (ref. Dr. St. en Z.), y que, además, el doctor Picht es mi ayudante. ¿Qué hacer en estos casos? ¿Cómo debería actuar para acabar con estos rumores? Te agradezco tus consejos. ¡Malos auspicios para el psicoanálisis, como verás! No hay que acometer empresas tan poco atractivas en solitario, a menos que se quiera salir escaldado.
Tras décadas de creación de estos mitos, hay una pregunta que se oye cada vez con más frecuencia: ¿quién era Jung? ”

Con esos párrafos abre Sonu Shamdasani el prólogo -El diletante más denostado- de su ensayo Jung y la creación de la psicología moderna, que publica Atalanta con traducción de Fernando Borrajo.
Jung es uno de los fundadores de una psicología científica vinculada a la antropología social, de una filosofía del inconsciente al que accede a través de la interpretación de los sueños y sus simbolismos oníricos. 
Subtitulado significativamente El sueño de una ciencia, es un estudio que aborda la compleja y controvertida figura de Jung como impulsor junto con Freud de la nueva psicología, una de las aportaciones más relevantes en el cambio de las concepciones culturales, en la configuración del pensamiento occidental y en la revolución de la mentalidad social contemporánea.

“Este libro se concibe -explica Shamdasani en el prólogo-como un retrato cubista y presenta un enfoque multifacético de una obra multifacética.” De ahí que sean muchos los aspectos que se abordan en relación con Jung y con su obra: desde las genealogías de lo inconsciente a la psicología de las masas, desde la multiplicidad de los sueños a los instintos y los arquetipos, los mitos y su relación con el sueño y con el inconsciente colectivo.
El presente trabajo -añade Shamdasani- puede considerarse un libro sobre Jung, y también sobre el surgimiento de la psicología y la psicoterapia modernas.”
Y con ese plan de trabajo se abordan en este volumen la constitución de la Psicología como disciplina científica, el psicoanálisis freudiano y la psicología compleja junguiana, dos hitos fundamentales de la historia intelectual del siglo XX.